A veces nos encontramos por el campo con aves raras o anómalas. No nos referimos a especies poco frecuentes, ni a ejemplares divagantes procedentes de países lejanos y por tanto muy distantes de su área de distribución habitual. Simplemente se trata de especies comunes y conocidas por todos, pero con alguna anomalía en su morfología o en su plumaje. En las siguientes fotografías se muestran casos concretos de aves que nos hemos encontrado en nuestras jornadas habituales de anillamiento científico. Todas muestran algún tipo de irregularidad que las hacen diferentes del resto de las de su especie.
Ejemplar juvenil de piquituerto común (Loxia curvirostra) anillado en Yerga, con malformación en el pico, del que sólo tiene un atisbo de la mandíbula inferior (Foto Oscar Gutiérrez) |